De la redacción
Córdoba.- El próximo 21 de diciembre, Juan Martínez Flores, presidente municipal de Córdoba, presentará su tercer informe de labores en un entorno marcado por severas críticas y el descontento de la ciudadanía. A los reclamos por la baja calidad de los servicios públicos y las denuncias de corrupción, se suman señalamientos hacia áreas fundamentales de su gestión, como el DIF municipal y el organismo Hidrosistema.
Manuel Molina Gómez, presidente del Centro de Investigación, Difusión e Implementación sobre Asociaciones Civiles (CIDIAC), calificó este informe como una muestra de falsedades. «Será un informe sin sustancia porque no hay logros que mostrar. El municipio enfrenta una pésima administración, con irregularidades en diversas dependencias y un abandono evidente de las necesidades sociales», señaló.
Agregó que el DIF municipal, bajo la dirección de María Elena Yunes Choperena, ha sido acusado de inacción, limitándose a utilizar únicamente programas estatales en lugar de generar estrategias propias. «Es un organismo que opera como un simple intermediario del gobierno estatal, dejando sin atención las problemáticas locales más apremiantes», aseveró Molina Gómez.
Subrayó que, Hidrosistema, encabezado por María del Rosario Palafox Aguilera, ha sido duramente criticado por su incapacidad para garantizar un servicio eficiente y su indiferencia ante las demandas ciudadanas. Según Molina Gómez, estas fallas son protegidas por el propio Juan Martínez Flores, quien permite una gestión que no cumple con las expectativas de los habitantes. «El alcalde no solo ignora estas deficiencias, sino que respalda una administración ineficaz que sigue generando frustración entre los cordobeses», concluyó.
